Jesús Heiras, pionero de la superconductividad en México

Por Karla Navarro

Ensenada, Baja California. 26 de julio de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Como parte de un grupo pionero en el estudio de la superconductividad experimental en México, fue que inició su trayectoria Jesús Leonardo Heiras Aguirre, investigador del Centro de Nanociencias y Nanotecnología (Cnyn) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), campus Ensenada.

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Su carrera se divide en dos principales estancias pero ambas con la UNAM: 30 años en la Ciudad de México y 17 años en Ensenada, lugar que conoció tras ofrecer una conferencia como parte de un congreso celebrado en esta ciudad.

El cambio de lugar no detuvo sus estudios en superconductividad, puesto que llegó en 1999 al Cnyn en Ensenada para integrarse a un grupo de investigación en ferroelectricidad, con el que actualmente sigue colaborando.

“En esa época había mucho entusiasmo por estudiar los superconductores de alta temperatura crítica, descubiertos en 1986 aproximadamente y eso generó una efervescencia de estudios en superconductividad, que era muy fuerte y muchos grupos se interesaron, gente que no había hecho superconductividad antes se interesó en este tópico”, relató en entrevista.

Einstein, la inspiración

Jesús Heiras recuerda que el interés por la física surgió en él a muy temprana edad y refiere que el primer personaje que influyó en su vocación fue el científico Albert Einstein, de quien solo escuchaba su nombre hasta la secundaria, cuando finalmente leyó uno de sus libros.

“Definitivamente me gustó mucho, empecé a tomar física y vi que me reafirmó la vocación, que va muchas veces ligada a la vocación en matemáticas, y eso era muy claro, que yo tenía cierta facilidad para matemáticas, eso ya te empieza a dirigir”, comentó.

Con su vocación determinada, Heiras estudió hasta la preparatoria en la ciudad de Chihuahua, de donde es originario, para después irse a vivir a El Paso, Texas en Estados Unidos, donde estudió licenciatura y maestría en físico matemáticas.

Refirió que en ese entonces, en 1963, en México había muy pocas instituciones educativas que ofrecieran la carrera de física, lo que lo motivó a elegir la Universidad de Texas, debido a la cercanía con su ciudad natal.

Estudios en el extranjero y el regreso a México

rec Heiras De su experiencia como estudiante en Estados Unidos, el investigador la considera una experiencia interesante, a pesar de que —por su corta edad— constantemente se cuestionó por qué estaba ahí.

Finalmente, se adaptó al hecho de tomar sus clases en el idioma inglés y al terminar la licenciatura optó por continuar sus estudios en la misma institución, pero la intención de regresar a México nunca se fue.

“Cuando terminé la maestría yo me pregunté si debería seguir estudiando en Estados Unidos y me pareció que no me convenía porque iba a perder contacto con la física en México y probablemente haría una especialidad con la que no habría nadie en México con quien colaborar”, compartió.

Fue entonces, en 1969, cuando decidió viajar a la UNAM, en la Ciudad de México, para emprender sus estudios de doctorado e inmediatamente después comenzó a impartir clases en la Facultad de Ingeniería y la Facultad de Ciencias de la misma institución universitaria.

Pero hacerse cargo de materias como ciencia de materiales y física cuántica no fue toda la oportunidad que le brindó la UNAM, ya que fue contratado en el mismo año en que regresó a México para trabajar en el Centro de Materiales.

“El Centro de Materiales estaba recién fundado y les estaba llegando equipo apenas, todavía no había edificio, y estaban por recibir una evaporadora y yo tenía experiencia con eso porque había trabajado en laboratorios en El Paso, Texas, y me contrataron para que manejara e instalara el equipo”, platicó.

Experiencias internacionales

Si bien en toda su carrera ha mantenido colaboración con la UNAM, Jesús Heiras considera que sus experiencias en países como Alemania, Canadá y Colombia han sido indispensables para ampliar su visión en torno a la ciencia.

Como parte de su doctorado, realizó una tesis en la Universidad de Alberta en Edmonton, Canadá, en estudios de efecto túnel con electrodos superconductores.

Posteriormente, en 1988, viajó a Alemania en calidad de científico invitado, donde permaneció por un año desarrollando investigación en el área de superconductores en el Instituto de Física de Estado Sólido Nuclear.

“En ese tema trabajamos de manera muy estrecha con la Universidad del Valle en Cali, Colombia, y posteriormente también hubo relaciones con gente de la Universidad de California en Santa Bárbara, en Estados Unidos”, mencionó el investigador.

Considera que este tipo de experiencias internacionales abre la puerta a la colaboración con otros investigadores que tienen acceso a equipos que, por su valor, son escasos a nivel mundial.

“Yo creo que el trabajo de los científicos mexicanos es excelente, está a nivel de cualquier país, pero uno tiene que tener esta interacción con el mundo exterior, desde luego que la ciencia actualmente se maneja en inglés, entonces es muy importante que uno salga y no solo por obtener bien el idioma sino por las costumbres, se da uno cuenta que la competencia puede ser feroz en algunos casos y te puedes dar cuenta en qué nichos puede uno incidir sin hacer grandes inversiones, buscar dónde se puede hacer una contribución real a la ciencia”, concluyó.

Divulgador de la ciencia

Además de cumplir con las tareas fundamentales de un investigador, Jesús Heiras se ha interesado en las actividades de divulgación de la ciencia, lo que lo ha motivado a participar en diversas agrupaciones.

Actualmente colabora en Matematiké, una asociación creada por investigadores y académicos y dedicada a brindar apoyo a estudiantes de todas las edades en el área de matemáticas pero también a incentivar el interés por la ciencia.

Participa también en el comité de museografía de Caracol, Museo de Ciencias y Acuario, donde hace sus aportaciones respecto a las exhibiciones que se implementan en el museo.

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