Proyectan un canal transístmico en México
Por Tomás Dávalos
Aguascalientes, Aguascalientes. 13 de noviembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- ¿Es viable crear un corredor transístmico en México que pueda competir con el Canal de Panamá? En el Centro de Investigación en Geografía y Geomática (Centrogeo), los investigadores Juan Gabriel Correa Medina y Loecelia Guadalupe Ruvalcaba Sánchez realizan un estudio que tiene por objetivo sentar las bases para la creación de un corredor de mercancías en el Istmo de Tehuantepec.
Al respecto, Correa Medina aseguró que este modelo ha comenzado a tener éxito en regiones de Asia y Europa, los cuales han creado órganos que se encargan de la planeación espacial, toda vez que consideran de suma importancia el ambiente, la cooperación y el desarrollo económico por regiones, dentro de estos esquemas los corredores resultan indispensables para el traslado de mercancías.
Una región convulsa
“La cuestión es que no es tan simple. Nosotros nos basamos en la incorporación de este tipo de prácticas basados en la experiencia de Asia. Cuando lees cuestiones relacionadas con el proceso que tuvo que vivir Asia para que estas zonas económicas especiales redituaran y transformaran económicamente la región, pues el proceso no fue tan sencillo, implica establecer algunos esquemas para evaluar los avances, estar continuamente mejorando los procesos para que en realidad puedas beneficiar tanto a los extranjeros como a los locales”, explicó Ruvalcaba Sánchez.
En relación con el Istmo de Tehuantepec, destacó que es una cuestión complicada porque se trata de una región pobre, en la cual desde hace mucho tiempo se ha tenido la intención de poner en marcha un corredor transístmico que le haga competencia al Canal de Panamá; sin embargo, esta zona no cuenta con los elementos que permitan el tránsito de mercancías de una manera tan directa, por ello se tienen que generar estrategias que permitan ir incorporando servicios.
Esta tropicalización del modelo asiático tiene muchos retos, pues se expone a la sensibilidad histórica de las comunidades indígenas, es probable que no se cuente con el capital humano necesario para resultar un área de inversión atractiva para las empresas extranjeras y existen además conflictos sociales muy fuertes. Por ello, la intención es abordar este tipo de problemas desde una perspectiva de desarrollo regional, incorporando cuatro ejes a este proyecto para hacerlo más robusto.
“Estamos pensando básicamente en cuestiones orientadas a transporte, que es vital para las cuestiones de logística; en tecnología, en esta cuestión hablamos de un término que es trazabilidad, necesitamos que si van a circular mercancías a través de esa zona, estas mercancías puedan ser perfectamente rastreables y, de alguna manera, eso le daría seguridad a quienes tengan la intención de transportar mercancías por esta vía; un tercer elemento sería la infraestructura, de hecho la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) tiene la intención de reforzar la infraestructura en esta región; y un cuarto elemento es la logística, todas las cuestiones de métodos inteligentes para poder agilizar este proceso”, señaló.
Ruvalcaba Sánchez indicó que estos avances no deben beneficiar en exclusiva los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos, por ello la intención del proyecto es que se establezcan empresas que permitan generar valor agregado a las mercancías que están circulando. Además, la región sur del país es rica en recursos naturales y tiene un clima benigno, por lo cual se debe procurar que los productos locales obtengan beneficios aprovechando la infraestructura que se genere y las facilidades que en un momento dado puedan otorgar la federación y los gobiernos estatales.
Zonas económicas
El pasado 1 de junio se publicó en el Diario Oficial de la Federación la ley que establece las zonas económicas especiales, una de las cuales se estableció en la región del Istmo de Tehuantepec, por ello resulta necesario analizar cómo se va a configurar, ya que la ley contempla zonas unitarias y zonas en secciones. También se debe considerar que cada una de ellas tiene características que la hacen especializada, ya sea en cuestiones de exportación, industriales, de logística y maquila.
“Acá, por ejemplo, se habla que se está creando el polígono 14 en Oaxaca, tiene la intención de ser una zona petrolera, porque esta es una zona muy rica en yacimientos, por un lado, y por otro lado, también en infraestructura para el proceso de los hidrocarburos, entonces ahí tenemos algunas empresas ya, por ejemplo, hay complejos siderúrgicos en Coatzacoalcos, en Salina Cruz hay una refinería, entonces sería aprovechar todos esos recursos e infraestructura que ya existen para lograr detonar la zona”, mencionó.
No obstante, se trata solo de elementos básicos, pues se requiere mejorar la logística, ya sea a través de un marco legal que favorezca el flujo de los negocios, que simplifique los procesos a través de una ventanilla única donde se podrán realizar los trámites de manera directa y de bonificaciones fiscales. Para esto último, resulta indispensable la organización para cumplir los requisitos que permitan la emisión del decreto que le dé a la región el carácter de zona económica especial y se pueda comenzar a realizar diversas gestiones.
Delimitación
Por su parte, el investigador Correa Medina señaló que la delimitación se hizo tomando en consideración aquellos municipios cercanos a la línea férrea que conecta las ciudades de Coatzacoalcos y Salina Cruz, pues si bien existen corredores logísticos que funcionan exclusivamente por carretera, si se pretende ser competitivos con el canal de Panamá o con algunos canales terrestres que ya existen en Estados Unidos, se necesitan mejorar los tiempos y los costos, por ello el ferrocarril es el mejor medio para establecer un corredor transístmico en la región.
“El gobierno federal no ha delimitado la zona, se supone que esta limitación es un proceso en el cual los gobiernos de los estados involucrados tendrían que proponer para ponerse de acuerdo, en este caso sería Veracruz y Oaxaca. Nosotros tenemos un primer prototipo, las zonas económicas especiales establecen un rango de población, se habla de que debe haber entre 50 mil y 500 mil habitantes; tenemos que considerar que la configuración de la zona tendría que cumplir con ese requisito, entonces hemos planteado la posibilidad de generar una zona intermedia o tres zonas en esa misma región”.
Asimismo agregó: “Con un algoritmo desarrollado en el Centrogeo, lo que se hizo fue seleccionar aquellos municipios por los cuales cruza la línea férrea, se seleccionaron 21 municipios en una franja de 300 kilómetros (…) Con el algoritmo obtuvimos 369 combinaciones diferentes, que toman siempre en cuenta los dos puertos, que son importantes para las zonas económicas especiales y son los municipios que tienen mayor población, así como el número de habitantes”.
A la par de la ubicación geográfica y la densidad poblacional, se lleva a cabo un esquema de organización respecto al potencial de cada una de estas zonas, con los productos y las industrias que los caracterizan, información que se está obteniendo de los censos que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y el propio Centrogeo, el cual ya cuenta con muchos datos georreferenciados.
Competencia
Cuando se han elaborado estudios en el pasado sobre la posibilidad de activar este corredor transístmico, se ha establecido que resultaría competitivo en tiempo en comparación con el resto de los canales, es decir, resultaría más rápido el traslado de mercancías por la zona del Istmo de Tehuantepec, que si los barcos bajaran hasta Panamá, particularmente cuando se trata del tránsito entre Asia y Estados Unidos. Incluso el vecino país del norte está utilizando sus propios corredores terrestres para evitar ir hasta el canal de Panamá, aun cuando resulta más oneroso.
“Un problema es que tenemos pocas navieras. Por ello nuestra primera intención es detallar qué estrategias debemos implementar para generar el desarrollo de adentro hacia afuera, es decir, si empiezo en esta zona a generar algunos productos de importación, entonces definitivamente las navieras van a tener que venir aquí por mercancía, ya sea que vaya a Europa o vaya hacia Asia, entonces eso de alguna manera puede generar un círculo virtuoso que en un momento determinado nos permita habilitar todo el corredor”.
Para ello se está realizando un análisis de inteligencia tecnológica, a fin de conocer las diferentes alternativas que existen para detonar la economía, infraestructura y los servicios de la región. La intención es generar, a partir de este estudio, un proyecto en tres fases: la primera es establecer una plataforma logística, atrayendo mayores servicios en materia de logística y distribución de mercancías; posteriormente se buscaría establecer el corredor logístico, una zona que ya ofrece servicios más integrales, por medio de multicanales para que el flujo de mercancías se dé a través de diversos medios y con plataformas de información y comunicación que garanticen su seguridad; finalmente, el corredor transístmico es el que permite transportar mercancía a través de diferentes países.
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