Calle Dr. Carmona y Valle
Por Aketzalli González
En la colonia Doctores de la delegación Cuauhtémoc en la Ciudad de México, se encuentra, cerca del jardín “Dr. Ignacio Chávez”, la calle “Dr. Carmona y Valle”; vía que conmemora al destacado médico mexicano Manuel Carmona y Valle, quien, además de fungir como director de la Escuela Nacional de Medicina en el siglo XIX, incursionó en temas socioculturales y científicos de su época.
Manuel Carmona y Valle nació el 3 de marzo de 1832 en la Ciudad de México; siendo pequeño se trasladó a Querétaro con su familia y allí realizó la educación básica. Posteriormente ingresó al Seminario Conciliar para cursar el bachillerato y en la Escuela Nacional de Medicina se graduó de médico. En París ingresó al Colegio de Francia para estudiar oftalmología al lado del eminente médico Desimones y, al mismo tiempo, asistió a los cursos de fisiología impartidos por el doctor Brown Sequard, donde realizó experimentos acerca de la influencia de la sección medular.
Al regresar a México, en 1865, impartió las materias de fisiología y oftalmología; siendo el primero que en México dio a conocer el oftalmoscopio, invención de Helmholtz. Asimismo, ideó una teoría sobre la refracción del ojo e ideó un cuchillo de forma especial con el que inició varios tipos de intervenciones quirúrgicas para el tratamiento de padecimientos oculares. Fue el primer médico mexicano en hablar del infarto pulmonar y en realizar investigaciones sobre la fiebre amarilla, el cólera y las fiebres pulmonares.
En 1866 obtuvo la cátedra de fisiología y en 1869 ganó la cátedra de clínica médica; cargo que ocupó hasta días antes de morir. En 1886 se le nombró director de la Escuela Nacional de Medicina y permaneció en el puesto durante 16 años y durante su dirección introdujo nuevos planes de estudio con asignaturas novedosas como histología y microbiología, además de anexar a la medicina campos nuevos como la farmacia, dentistería y enfermería.
Fue uno de los miembros fundadores de la actual Academia Nacional de Medicina, que tiempo después se convirtió en Sociedad Médica de México y en 1874 se conformó definitivamente como Academia de Medicina. De igual forma fue parte de la Sociedad Médica “Pedro Escobedo” y del primer Congreso Médico Nacional y del segundo Panamericano.
En el ámbito político fue senador de la República y presidente municipal de la Ciudad de México, lugar donde falleció el 24 de octubre 1902. Otra evocación a su labor es el monumento erigido en su honor ubicado en el Jardín de los Médicos, en la colonia de los Doctores, frente al Centro Médico Nacional Siglo XXI.
Fuente: Gaceta de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), mayo de 2001.
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