¿Sabías que…se puede diagnosticar enfermedades mediante la inspección y palpación del cabello?
Por Carmen Báez
Cuando se hace un exploración física del cabello mediante la inspección y palpación, se pueden obtener datos (color, brillo, densidad, etcétera) que siguieren posibles enfermedades, esto de acuerdo con el libro Convivir con los problemas capilares de la autora y profesora titular de Dermatología Médico Quirúrgica y Venereología de la Universidad Complutense de Madrid, Aurora Guerra.
Algunos ejemplos son:
Color: Las canas muy precoces pueden ser signo de alteración del tiroides, vitíligo, anemia perniciosa o síndrome de envejecimiento prematuro.
Brillo: La falta de brillo acompaña a la celiaquía sin tratamiento y la mala absorción intestinal adquiridas por cirugías previas.
Menor densidad: el poco pelo desde siempre puede ser signo de hipotricosis congénita, un término que se utiliza para describir una condición de ausencia de crecimiento de pelo. Una menor densidad de pelo también puede ser señal de síndrome del cabello anágeno suelto, que se caracteriza por el arrancamiento fácil de cabello sin dolor; de acuerdo a la literatura científica, afecta principalmente a pacientes de edad pediátrica, generalmente niños de pelo claro.
Longitud: una detención del crecimiento se produce en alteraciones metabólicas o carenciales, como la anorexia nerviosa, en alteraciones psíquicas.
Forma: es un dato constitucional pero puede haber cambios en algunas recuperaciones de alopecias, por ejemplo, tras la quimioterapia o en la alopecia areata, esta última es una enfermedad que afecta las áreas de la piel que dan crecimiento al pelo, incluso puede causar la pérdida total de este.
Estado del cuero cabelludo: se puede diagnosticar psoriasis, dermatitis seborreica, liquen, esclerodermia localizada, lupus eritematoso, entre otros.
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